Después de ocho años de ausencia, hoy se retoma en Oruro, la realización del Festival Internacional de Cine de Oruro "Diablo de Oro", donde siete producciones bolivianas compiten para llevarse la estatuilla dorada, cada una con características diferentes.
La primera es "El olor de tu ausencia" de Eddy Vásquez, que relata el viaje que explora la vida de tres personajes, alejadas de toda referencia social boliviana. Un recorrido a través del recuerdo y el alma de tres vidas que buscan redención en medio de su autodestrucción, es sobre todo una expresión de una generación olvidada en un país extraviado que busca su propia identidad.
También compite "Ivy Maraey" de Juan Carlos Valdivia, que trata de un cineasta y un líder indígena, que viajan juntos por los bosques del Sudeste boliviano con el objetivo de investigar para una película sobre el mundo guaraní. El punto de partida es una imagen en movimiento de unos salvajes filmada por un explorador sueco en 1910. Pero el presente tiene más posibilidades que la nostalgia de un mundo perdido para siempre.
Otra candidata para el "Diablo de Oro" es "Norte estrecho" de Omar Villarroel, es un largometraje iberoamericano que toca el tema migratorio de Latinoamérica a los Estados Unidos. En el filme se cuentan las historias de migrantes latinoamericanos que radican en Estados Unidos y que se comunican con sus familiares en un local de videoconferencias, propiedad de un residente ilegal.
La película "Olvidados" de Carlos Bolado, es otra candidata para el premio, que trata sobre el "Plan Cóndor", un sistema de represión militar coordinado por los dictadores de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay en los años ´70, para coadyuvar en la desaparición de opositores a los regímenes.
También está en competencia "Procastinación" de Sergio Pinedo, un film que demuestra una actitud a través de una puesta en escena arrebatada y radical, que condice con el espíritu del Festival en la búsqueda de nuevas formas de producción, desde las miradas y las realidades a las que el autor apela.
Una firme candidata a ganar la estatuilla es "Olalla" de Amy Hesketh, una película basada en el relato de Louis Stevenson, una película de terror, donde se ven involucrados vampiros bolivianos, cuenta la historia gótica de una familia de vampiros genéticos en decadencia que necesita de sangre humana para sobrevivir y prolongar sus vidas y donde el incesto es la única forma de continuar su línea familiar. No se juntan con el mundo exterior y cuando lo hacen las consecuencias pueden ser funestas.
Finalmente, "El cuarto" de Juan Pablo Milán, que cuenta la historia de Amanda (Andrea Rincón), quien trabaja en un prostíbulo de mala muerte. Como Amanda es la prostituta más linda, ella recibe clientes de todo tipo y clases sociales. Todos la desean y la visitan y su habitación se convierte en una suerte de confesionario de historias secretas e íntimas.
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