Hoy se confiere la segunda versión de los Premios Semilla del Cine Boliviano

GUILLERMO AGUIRRE, UN PROLÍFICO GUIONISTA BOLIVIANO. ENTRE SUS OBRAS ESTÁN "MI SOCIO" Y "EL DÍA QUE MURIÓ EL SILENCIO".

La Fundación Cinemateca Boliviana confiere el Premio Semilla, este año, al guionista, escritor, camarógrafo y periodista Guillermo Aguirre, y, también, al empresario, gestor cultural y expresidente de la esta fundación, Francisco Muñoz. Este acto es realizado en el marco del Día del Cine Boliviano, 21 de marzo, en el cual se conmemora el asesinato de Luis Espinal Camps. La premiación será el día jueves 21 de marzo, a horas 19.30, en la Cinemateca Boliviana, calle Óscar Soria, Esq. Rosendo Gutiérrez Nº 110.

Mela Márquez, directora de la Fundación Cinemateca Boliviana, afirma que, como su nombre lo expresa, los Premios Semilla del Cine Boliviano tienen el objetivo de reconocer a aquéllos que fueron “semilla” en el cine boliviano. “Claro que hay muchos póstumos, como el propio Luis Espinal; pero ahora la intención es hacer homenajes en vida de los que han sido mentores”, afirma.

Márquez declara que, en esta versión, los galardonados con los premios son Guillermo Aguirre y Francisco “Cacho” Muñoz. El año pasado el reconocimiento fue otorgado a Norma Merlo. “Hicimos una especie de ‘dos en uno’, ya que Norma Merlo es tanto gestora cultural como actriz”, declara.

Por otro lado, quien mañana será homenajeado por su aporte creativo y técnico en sus 38 años dedicados al cine, Guillermo Aguirre, guionista de las consagradas películas bolivianas “Mi socio” (1982) y “El día que murió el silencio” (1998), entre varias otras, asevera, a manera de anécdota, que sus logros en el cine fueron “de entradita”, junto al Grupo Ukamau, bajo la dirección de Antonio Eguino.

Le habían encomendado, comenta, conseguir dos alcohólicos en situación de calle para una secuencia de "Chuquiago". Por aquel entonces, algunas personas que vivian en la bebida, en San Juan, realizaban un campeonato por la zona El Tejar. “Yo ofrecí una lata de 16 litros de alcohol para el ganador. Así fue, y empezaron con el trago. Yo, preocupado al ver el aguante que ellos tenían para beber, les seguía la corriente, hasta que a las cinco de la mañana los llevé con Antonio Eguino, para realizar las secuencias, entonces empezó mi carrera en el cine nacional”, comenta entre algunas risas el ahora consagrado guionista.

Aguirre fue ganador de varios premios, entre ellos el Premio Nacional de Cuento Franz Tamayo, en el 2000, con "El avión y la miel". También consiguió un premio en Cuenca, Ecuador, con su libro Las comadres, entre varios otros.

Actualmente posee guiones de importancia, entre ellos sobre Melgarejo; otro, sobre los defensores de Boquerón, y también sobre Túpac Katari.

“Estoy profundamente agradecido. En realidad yo me siento un ‘descarte’, que es un pedazo de cinta recortada durante la edición que al final no logra verse en la película”, afirma el hombre que tiene 65 años de vida y 38 de ellos dedicados al cine nacional.