Con una selección de largometrajes de cine boliviano, una muestra de producciones de Latinoamerica, documentales, una retrospectiva de Werner Herzog, una competencia iberoamericana de cortometrajes, talleres y conferencias, entre otras actividades, renacerá el festival Internacional de Cine de Oruro (FICO), que alista su cuarta versión luego de un receso de ocho años.
El encuentro -que busca promover la cultura cinematográfica en Oruro, impulsar la formación en jóvenes, y difundir la producción nacional- otorgará el premio "Diablo de Oro", a la mejor película boliviana y al mejor guión de cortometraje.
El festival se realizará del 3 al 7 de noviembre en el cine Gran Rex. El lanzamiento se hará el 30 de septiembre.
OBJETIVOS. "En la historia del cine boliviano, Oruro ha sido una plaza importante de estrenos; y el encuentro motivó un gran movimiento de cinematografía en la ciudad", resaltó Juan Pablo Ávila, director del FICO, sobre la importancia para retomar el festival que tuvo sus tres versiones en 2005, 2006 y 2007.
En ese tiempo, la organización fue compartida con terceras personas, quienes se quedaron con el festival y no lo realizaron más.
"Ahora el festival tiene características nuevas. Han pasado varios años y considero necesario dar a Oruro este festival", expresó el también encargado del Cine Teatro Municipal 6 de Agosto.
El propósito del festival, además de la exhibición de filmes -con plazas para películas iberoamericanas, latinoamericanas y bolivianas-, es potenciar a jóvenes creadores para la realización de cortometrajes. Para ello, se contará con el Premio Nacional de Guión "Luis Ramiro Beltrán", cuyo ganador tendrá una asesoría de guión y producción, así como la edición de su trabajo.
PROGRAMA. A una selección de películas para todo público y una muestra de cine Boliviano (estrenos desde el año 2013), se sumará una retrospectiva de Werner Herzog, además de un panorama de cine Latinoamericano con filmes de Perú, Argentina y Cuba, entre otros.
"Estamos propiciando talleres, de apreciación cinematográfica, de crítica, un taller de producción, de guión. Estamos cerrando (la participación) con varios cineastas para que compartan con el público", adelantó Ávila, quien se expresó sorprendido por la repercusión de la convocatoria de cortos iberoamericanos. Informó que, a la fecha, se recibió propuestas de Brasil, Nepal, México, Venezuela, España, Brasil y Chile. Los temas de distribución y exhibición; producción ejecutiva para el cine boliviano; cómo hacer películas con bajo presupuesto, gestión cultural y mercados culturales; y fundamentos para hacer cine documental en Bolivia, también tendrán espacio en conferencias.
Asimismo, el programa incluye los homenajes a Tonchy Antezana (director de cine), Gustavo Portocarrero (director de la Escuela de Cine y Artes Audiovisuales de La Paz), Fundación Cinemateca Boliviana, Viviana Saavedra (Bolivia Lab), y Mariano Baptista Gumucio (documentalista).
El primer paso, tras retomar la organización del festival, es que este continúe su realización cada año, y a futuro, proyectarlo al interior y exterior del país.
COMPETENCIA DE LARGOMETRAJES BOLIVIANOS. Las producciones bolivianas: Boquerón, de Tonchy Antezana; Olalla de Amy Hesketh; El Cuarto, de Juan Pablo Milan; El olor de tu ausencia, de Eddy Vásquez; Norte Estrecho, de Omar Villarroel; Olvidados, de Carlos Bolado; y Procrastinación de Sergio Pinedo competirán en el festival por el premio Diablo de Oro.
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