La cineasta argentina Paula Markovitch arrasó el martes en la edición 55 de los premios Ariel, otorgados por la Academia de Cine mexicana, al ganar con su película "El Premio" los galardones a Mejor Película, Ópera Prima, Guión Original y Montaje.
En el estrado de la ceremonia, celebrada en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México, también fueron ovacionados el español Pablo Berger, que ganó en la categoría de Mejor Película Iberoamericana por "Blancanieves", y el uruguayo Rodrigo Plá, que se llevó la estatuilla por mejor director con su obra "La demora".
"Agradezco a México, que es mi país por elección desde hace 22 años, y agradezco la tolerancia y amplitud de criterios; las obras de arte no tienen nacionalidad fija", dijo visiblemente conmovida Markovitch, nacida en Córdoba, Argentina.
Al recibir el galardón por el mejor Guión Original, la directora de "El Premio", que cuenta la historia de una madre y su hija que viven en el exilio a causa de la dictadura militar en la Argentina de la década de 1970, dijo que "el texto para cine es una obra literaria independiente" y dedicó el reconocimiento a "todos los escritores que escriben literatura para cine".
En 2011, "El Premio" ganó como Mejor Fotografía y Diseño de Producción en el Festival Internacional de Cine de Berlín.
En la ceremonia del cine mexicano, en la terna ganada por el español Berger por su película muda y en blanco y negro "Blancanieves", competían la chilena "No", de Pablo Larraín y la ecuatoriana "Pescador", de Sebastián Cordero.
La premiación arrancó con el reconocimiento al actor mexicano Daniel Giménez Cacho por Mejor Coactuación Masculina en la cinta "Colosio: El asesinato", que trata sobre la muerte de un candidato presidencial, y aprovechó el estrado para pedir más apoyo para la industria cinematográfica mexicana.
Otra crítica política, expuesta con consignas coreadas en el escenario, fue espetada por Trinidad Domínguez, protagonista del cortometraje documental "La herida se mantiene abierta", de Alberto Cortés, triunfadora en esa categoría, que sintetiza luchas del pueblo de Atenco, suburbio de la capital mexicana, por la exitosa movilización para derogar un decreto expropiatorio de sus tierras para la construcción de un aeropuerto.
Fuente: AFP
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